San José y el Niño
del siglo XVIII
La felicitación navideña de la Fundación Luis Muñoz Marín

Un San José y el Niño del siglo dieciocho adorna la portada de la tarjeta de Navidad de este año de la Fundación Luis Muñoz Marín. Es una de las más antiguas y mejor conservadas piezas de imaginería popular puertorriqueña que han alcanzado nuestros días y la donó a la Fundación recientemente Teodoro Vidal. El uso de esta imagen en la tarjeta es parte del programa Arte en la Navidad, iniciado hace varios años por la institución, que tiene por norma presentar en sus felicitaciones de Pascua objetos o documentos procedentes del valioso acervo de su archivo histórico.

San José es uno de los santos de más honda devoción en Puerto Rico, y es un hecho histórico que al fundarse el convento de las monjas carmelitas en el antiguo San Juan, en 1621, fue seleccionado por la comunidad como patrón del monasterio. En las casas de nuestros pueblos y campos las imágenes del Santo han sido frecuentes desde tiempo inmemorial y se ven a menudo en los velorios tradicionales que celebra el campesinado durante la temporada navideña.

La talla del esposo de María que vemos reproducida en la tarjeta de la Fundación es de cedro hembra, conserva su policrmmía antigua y mide con la base 36 centímetros de altura. Su autor se desconoce y procede la imagen de un oratorio que había en una casa particular del pueblo de Cataño. La imagen de la escultura fue tomada por el fotógrafo artístico Eric Borcherding.

Se incluye en la tarjeta de la Fundación el facsímil de un documento de especial interés en estos días: la hermosa carta que de su puño y letra le escribió don Luis Muñoz Marín al pueblo de Puerto Rico en 1972 con motivo de la Pascua. El texto de la misiva dice en parte:

Van mis felicitaciones en estas navidades y año nuevo de regocijo hondo para nuestra patria. Puerto Rico ha re-emprendido, con juventud y alegría, el segundo tramo de su viaje de esperanza hacia una vida de paz y altura de pensamiento, en la que hemos de enorgullecernos más por la justicia que hagamos que por las posesiones o posiciones que adquiramos. Un pueblo del buen saber democrático que tiene el nuestro no merece menos de sus líderes, ni puede conformar con menos a su propia conciencia.

Felicidad y humildad de espíritu y grandeza de alma le deseo a mis compatriotas en las navidades que son tiempo de renovación de grandes propósitos.

Para adquirir otras tarjetas navideñas de la Fundación como la Virgen y el Niño y la Virgen de Monserrate, puede comunicarse con la Fundación Luis Muñoz Marín a los teléfonos 755-7979, 755-4506 ó 761-7442 o escríbanos a nuestro .

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